Julio-agosto de 2008
Año IV, Número 33


Los ingresos de PEMEX no se están canalizando adecuadamente:
Fabio Barbosa Cano

En entrevista con Humanidades y Ciencias Sociales, Fabio Barbosa Cano explicó que la caída de la producción petrolera no obedece a factores geológicos ni de ingeniería: "PEMEX cuenta con gran potencial petrolero; así lo demuestran los amplios, vastos estudios geológicos realizados desde hace décadas. Ese potencial también ha quedado demostrado con la cuantiosa inversión realizada recientemente con estudios de geofísica. Una prueba concreta la tenemos con los cientos de nuevas localizaciones de perforación de las que ahora disponemos".

"No soy el único que formula esas afirmaciones. En su reciente libro, el ex director de PEMEX, el ingeniero Raúl Muñoz Leos, afirma que el Plan de Negocios 'Exploración y Producción', al momento de su salida, estaba constituido por casi un centenar de proyectos de inversión sólidamente documentados. A las mismas conclusiones llegamos quienes, estudiando el potencial petrolero de México, seguimos indicadores como la densidad de perforación, el número de cuencas, sus extensiones y posibilidades aún no explotadas".

¿Por qué el Plan de Negocios no se desarrolló en los términos programados? ¿Por qué la producción se ha reducido?

-Ha disminuido en términos relativos, porque si bien Cantarell ha caído en casi un millón de barriles diarios, otros complejos como Ku Zaap Maloob han elevado su producción en casi 2.5 ó 3 veces.

La respuesta es que a PEMEX se le niegan recursos para perforaciones; se le escatiman presupuestos para emprender proyectos de recuperación secundaria y mejorada; no se le otorgan las inversiones necesarias para emplear tecnologías que le permitan elevar el factor de recuperación. En la disputa por la renta petrolera se le despoja de sus ingresos y se le niegan incluso los presupuestos para dar mantenimiento a sus instalaciones.

Algunos proyectos, como los de inyección de nitrógeno en campos del sureste, o no se han realizado o han iniciado tardíamente; además, han sido sólo unos pocos, relegando muchos otros como Cactus y Sitio Grande.

En términos económicos, ¿cuál es el estado actual de PEMEX?

-En 2003 se inició un alza de precios que, aunque en las últimas semanas ha tenido altibajos, ha permitido a PEMEX captar los volúmenes de divisas más elevados en la historia de las exportaciones petroleras de México; sólo el año pasado, ingresaron por ese concepto más de 100,000 millones de dólares.

Pero esos ingresos no se están canalizando adecuadamente. Una parte se dilapida en subsidios a la gasolina, los cuales be-nefician sobre todo a los sectores de mayores ingresos; otra parte se destina al gasto corriente. En el debate actual, grupos muy numerosos han demandado un cambio en esta situación. No obstante, el verdadero malestar, la situación de derroche o desperdicio de los recursos, persiste.

¿Cómo repercute la actual crisis de Petróleos Mexicanos en la economía nacional?

-Si nos referimos a la rama de actividades primarias, la caída -muy pequeña- de la producción y exportación está siendo compensada por los altos precios. Otros impactos, como el alza de los precios del gas natural a las empresas que lo utilizan como insumo -cerámica, cementera, metalúrgica-, no expresan una crisis de PEMEX; son manifestación de una errónea política económica que castiga al aparato productivo para privilegiar la recaudación fiscal. Como lo ha señalado CANACINTRA, ese problema puede resolverse, implantando lo que los industriales llaman el Precio México -costos más un margen de utilidad razonable.

De continuar PEMEX con el mismo modelo administrativo, ¿qué panorama podemos esperar en diez años?

-PEMEX avanza en sus proyectos independientemente de que en la sociedad mexicana se produzca un debate, y de que algunos sectores de la población manifiesten opiniones opuestas a las acciones de la paraestatal.

Por ejemplo, ésta avanza incontenible hacia las aguas profundas. Ya contrató cinco equipos por un equivalente a veinte años de perforaciones, y tiene actualmente garantizadas las perforaciones de 35 pozos en aguas profundas; es decir, podrá continuar perforando sin interrupciones, de este año al 2015 en las aguas profundas del golfo de México.

Es una especie de esquizofrenia. Mientras algunos siguen pensando que las actividades de PEMEX son tarea para un futuro lejano, en los hechos avanza al golfo profundo: el pasado 7 de marzo constituyó el primer activo para la explotación de los primeros campos mexicanos en aguas profundas. Este activo explotará reservas ya descubiertas -no recursos prospectivos- en aguas profundas con un volumen de 2.4 billones de pies cúbicos de gas natural, frente a las costas de Catemaco, Veracruz.

En Chicontepec, también en Veracruz, ya constituyó un nuevo activo y se prepara para duplicar la producción de esa área en este mismo año. Así, mi respuesta es: PEMEX no está con los brazos cruzados; ya construye el escenario de los próximos diez años. Otra cosa es que ese escenario corresponda a los intereses nacionales.

Al mismo tiempo, la opacidad en el manejo de los recursos continúa. Los despidos de trabajadores, especialmente en la región sur, prosiguen como si no se hubiera realizado ningún debate.

Fabio Barbosa Cano es maestro en Historia de México por la UNAM, investigador asociado del Instituto de Investigaciones Económicas y especialista en economía del sector energético. Actualmente labora en un proyecto de investigación sobre los hidrocarburos en el golfo de México.